El icónico nombre Pan Am busca resurrección en el cielo comercial
Pan American World Airways, una de las marcas más legendarias y emblemáticas de la historia de la aviación, se prepara para un posible y esperado regreso a los cielos. Su intención es volver a operar después de una ausencia que se ha extendido por más de tres décadas.
La reactivación de este gigante histórico está siendo impulsada por la firma de consultoría y capital aeronáutico AVi8 Air Capital. La compañía ha finalizado un plan de negocios que busca relanzar la marca con una propuesta adaptada a la aviación moderna.
El proyecto ya ha dado un paso formal crucial. La empresa propietaria de los derechos de la marca, Pan American Global Holdings, junto a AVi8, han iniciado el proceso de certificación para operar como aerolínea regular.
La certificación de la FAA como paso clave
Este trámite de certificación se realiza ante la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA). Es un proceso riguroso que busca obtener la autorización para operar bajo la normativa Part 121, la que rige a las grandes aerolíneas comerciales estadounidenses.
AVi8 ha comunicado que el equipo encargado de liderar la certificación es de «clase mundial». Además, ha recibido un «fuerte apoyo inicial» de proveedores clave y arrendadores de aeronaves, lo que indica la seriedad del proyecto.
El plan de negocios establece que la nueva Pan Am tendrá su base principal de operaciones en Miami. Esta ciudad es un centro logístico estratégico y uno de los hubs aéreos más importantes del país norteamericano.
Nueva flota y leyenda nostálgica
Un cambio significativo respecto a la historia de la aerolínea es la elección de la flota. Se ha anunciado que la compañía volará con aeronaves Airbus, marcando una ruptura con la tradición de la Pan Am original, que históricamente estuvo muy ligada a los modelos Boeing.
El declive de la aerolínea original, que fue la más grande de Estados Unidos durante gran parte del siglo XX, se produjo en 1991. Una combinación de la crisis del petróleo de los setenta y la posterior desregulación del mercado aéreo llevó a su quiebra.
A pesar de su desaparición, el nombre Pan Am mantiene un enorme valor simbólico, evocando la «era dorada» de los viajes aéreos. Los promotores confían en que esta nostalgia, sumada a un modelo de negocio eficiente, pueda garantizar el éxito de este ambicioso retorno.
Fuente: aviacionaldia.com
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